miércoles, 26 de enero de 2011

La vida

... y porque no dí con un canalla cien por cien, o porque a él, el miedo de ser descubierto también le atenazara...El caso es que salí de cuerpo y trauma ilesa.

Fue la primera vez que bebí de la copa de la inculpabilidad. Aunque más tarde bebí de ella innumerables veces.

Como dice el viejo tango:

"Hoy todo ha pasado,
renace la calma..."

Y esto es lo que sucede de veras. La calma es la protagonista de mi vida.

No desgarraré el velo.

Que cada cual descubra la incógnita.

Al fin y al cabo cada días no es otra cosa que un misterio a descubrir.

Los Hermanos Macana Milonga

lunes, 24 de enero de 2011

Pónlo tú

Sucede de todo en el espíritu, en la mente humana. Sucede el desencuentro, la apatía, la pasión y hasta el encefalograma plano, el electrocardíograma plano.
Una se pregunta si ante éste novedoso prisma sigue siendo algo vivo.
La respuesta es pronta cuando otro ser humano muestra el más mínimo interés.
Sin embargo no todos aspiramos a sentirnos seres humanos con nuestras complejidades y desvelos típicos. ¡No! Hay que admitir que se dan seres humanos que no sienten la angustia, la necesidad, la solidaridad, ni la piedad de los otros o por los otros.

Todo cabe en la palabra humanidad.

Oigo gente- muy joven- que no siente el menor interés por nadie. Al igual que oigo a gente mayor sintiendo lo mismo.

No hay que excluir a nadie de una edad determinada para que concluyan en las mismas posturas.

Se trata, más bien de ideales.

Hay ideales que se manifiestan más amables con la generalidad, con el bienestar común que otros.

Ha sido así siempre.

Pero, avanzar debe tener otro significado. Y este a de mostrarse sin falsedad, sin ocultarse bajo ningún falso cariz.

Es arduo distinguir esto.
No. Y sin énfasis alguno.
Si prestamos atención a las señales que la historia nos relata, nos bastará.
Pero no lo hacemos.
1- Porque la historia no se nos cuenta con rigor.
2.-Porque la cuentan aquellos que se interesan más por sus propia
postura e intéreses que por el valor intrínseco para las generaciones
venideras.
La historia no se cuenta para aprender de ella, sino para fascinación de los que la narran.

Hay tantas historias como personajes la cuentan,, pero nunca habla de los personajes que la sufrieron.
Y, es igual el color de sus banderas.
¿Quién se atreve a negar que existen poderosos con conciencia.?
No vamos a caer en red alguna.
Miremos a Túnez.
Europa. La vieja Europa, vuelve a hacer de las suyas.¡ Y no nos equívoquemos; no se trata de la "Unión Européa" sino de la Europa
colonial. Se trata de la globalización; o sea, de la misma fanfarria de siempre.

Sí, me desvío. Me pierdo en el modo de escribirlo, pero no en el fondo de sentirlo.
Pondría en las escuelas películas, reportajes. Y daría menos aritmética.
Daría más conciertos que clases aburridas de geometría. Implicaría más a los niños a crear que a obedecer a ciegas.
Y hasta debería implicarme yo misma mucho más que en predicar desde un cómodo sillón. Pero ni tengo huevos ni humor.